Quizás estamos más acostumbrados a ejecutar toneles como maniobras defensivas, combinadas con tijeras para hacer más difícil al perseguidor apuntarnos y alcanzarnos o, simplemente, para reducir nuestra velocidad al aproximarnos a un bandido, pero el tonel y sobretodo el tonel volado (usando los pedales), nos ofrecen grandes posibilidades en determinadas situaciones de ataque.

Posición de partida de la maniobra.-

Imaginemos una situación en la que nos acercamos (es decir, que vamos más deprisa que él) al enemigo desde sus 5 en una típica persecución muy adelantada, es decir con un rumbo de interceptación que nos lleva a apuntar nuestro morro muy por delante del enemigo (posición 1). 

El enemigo nos detecta mirando por encima de su hombro derecho y rompe hacia nosotros, es decir a su derecha, que es la maniobra lógica para evitar tal ataque aprovechando su menor radio de giro al llevar menor velocidad. (posición 2).

¿Qué sucede a continuación?

Pues principalmente que la velocidad relativa de acercamiento entre los dos aviones aumenta drásticamente al ceñir el alemán su viraje hacia nosotros y lo que iba a ser un tiro de pocas Gs y poca corrección se convierte (si seguimos empeñados en dispararle) en un tiro casi imposible, con el enemigo a máximas Gs y con tal ángulo de corrección que tendríamos que empezar a disparar con el avión enemigo oculto por nuestro propio morro, lo cual está al alcance de muy pocos y, en todo caso, permite al alemán improvisar ante nuestra falta de visibilidad.

¿Cuáles serían las maniobras más habituales ante esta situación?

Una de ellas, quizás la más inapropiada, sería intentar seguir el viraje cerrado a derechas del enemigo confiando en nuestra mejor capacidad de giro.

Pero claro, en este caso, concurren dos factores negativos: por un lado, la mayor velocidad que llevamos lo cual aumenta nuestro radio de giro; y por otro, el hecho de que la iniciativa en la ceñida la lleva el alemán, con lo que ese pequeño espacio de tiempo que tardamos en reaccionar y tirar de la palanca también juega en nuestra contra.

¿Resultado de tal maniobra? El llamado "overchute"; somos incapaces de ceñir tanto como el enemigo, nuestro viraje tiene un radio mucho mayor y acabamos perdiendo tanto la ventaja que teníamos en la posición 1 como la energía extra que nos permitía acercarnos al alemán. Adiós a nuestro derribo, el alemán tiene tiempo de sobra para picar o trepar y alejarse y nosotros ya no tenemos ventaja de velocidad para impedírselo.

Ya oigo a alguno diciendo: "Esta la se, esta la se: YO-YO alto" Pues NO :-) El yo-yo alto es posiblemente la maniobra que ejecutaría la mayoría en estas circunstancias, pero no la mejor. Veamos por qué.

En la posición de partida de este supuesto los dos aviones llevan rumbos casi paralelos y nuestro morro apunta muy por delante de la posición del enemigo.

Si cuando éste comienza a cerrar el viraje trepamos para hacer el yo-yo alto (en la imagen la líne discontinua simula la  parte de trepada), el alemán nos pasa por debajo y perdemos su referencia visual a lo largo de la trepada y hasta que somos capaces de mirar nuevamente hacia abajo y a nuestras tres (zona negra punteada). Pero puede que el alemán ya no esté allí cuando queramos recuperar la posición detrás suyo.

Y es que como llevamos esa persecución adelantada encaminada a obtener una posición de tiro en el cruce, en el momento que nosotros iniciamos el yo-yo, el enemigo pasa por debajo nuestro ciñendo su viraje, con lo cual le perdemos de vista. Pero sólo nosotros, puesto que él sólo tiene que mirar hacia arriba para vernos ejecutar el yo-yo, en cuyo momento puede cambiar de táctica, simplemente ejecutar medio tonel más a su derecha y romper en medio rizo hacia el suelo, con lo que cuando queramos acabar el yo-yo y ponernos detrás el alemán se encontrará a distancia y velocidad inalcanzable. Adiós al posible derribo de nuevo.

Y es que el yo-yo es una adecuada maniobra para una situación similar, pero no idéntica, como la que vemos en la imagen.

Si nuestro rumbo no es de persecución adelantada, sino que nos dirigimos en rumbo más perpendicular hacia el bandido, de modo que, a consecuencia de la ceñida del alemán, al momento del cruce pasemos atravesando la estela, es decir, por el plano posterior del defensor, en ese caso sí debemos ejecutar el yo-yo alto, pues siempre tendremos al enemigo controlado a nuestras 3 y bajo, pudiendo contrarrestar inmediatamente nuevas maniobras.

Y desde luego tampoco parece lógico ceder palanca y no responder a la ceñida del alemán instantáneamente, sólo para lograr la posición idónea para el yo-yo. Sobretodo existiendo otra maniobra mucho más práctica y también, por qué no, mucho más bonita y espectacular: EL TONEL VOLADO DE ATAQUE.

Nota: para describirlo gráficamente he tenido que recurrir a un diagrama encontrado en la web de Sim HQ pues mis dotes pictóricas tienen claramente el límite de las dos dimensiones, y la maniobra debe explicarse en tres para un buen entendimiento de la misma.

Seguro que con el dibujo alguno ya ha comprendido todas las ventajas de la maniobra. ¿Bonita eh? ;-)

Como se aprecia, el atacante pasa por la trayectoria del defensor siempre por delante de éste o, como muy tarde, a la vez (posición entre A y B) debido a la persecución adelantada que llevaba en la posición A.

Pero poco antes el atacante había iniciado la trepada, acompañada del alabeo hacia la izquierda, es decir, hacia el enemigo, es decir, justo al contrario que en el yo-yo alto. así las cosas, cuando llega a la posición B, el atacante está "panza arriba" y sigue teniendo perfecta visión del defensor debajo suyo, pudiendo así controlar si mantiene su viraje cerrado o intenta escapar, en cuyo caso y gracias también a la ventaja de altura alcanzada gracias a la ventaja de velocidad que traía de la posición A, podrá reaccionar rápidamente y contrarrestar la nueva maniobra. Pero sigamos suponiendo que el defensor mantiene el viraje iniciado como rotura defensiva.

Al salir de la posición B, ya en la cúspide de la trepada y con medio tonel ejecutado, se sigue terminando éste mientras se baja el morro para acabar en la posición D, muy ventajosa frente al defensor.

Pero es más, resulta que el atacante, a partir de la posición B, puede elegir como atacar al defensor, pues ciñendo fuertemente hacia él podría llegar a una nueva persecución adelantada o ciñendo algo menos descolgarse por detrás y debajo de él en una persecución retrasada en la que la mayor velocidad alcanzada con el picado le permitirá acercarse fácilmente y por debajo para el tiro de gracia.

La maniobra se perfecciona aún más si se acompaña de la presión correspondiente sobre el pedal que necesitemos para no perder de vista al enemigo, y que dependerá de que la maniobra se ejecute totalmente en el plano anterior del defensor, en cuyo caso necesitaremos pedal contrario al sentido del tonel ("el tonel volado de ataque" auténtico y precioso) o bien, si la hemos ejecutado por encima justo del defensor, pedal del sentido del alabeo para ayudar al tonel a ejecutarse más rápido, si vemos que el defensor se nos mete debajo.

En mi humilde opinión, resulta mucho más impresionante y efectiva la maniobra del tonel volado de ataque, pues comienza antes, se realiza totalmente por delante del enemigo y, lo que más bonito queda, con mucha más parsimonia y lentitud tanto en la trepada como en el tonel en sí, controlando siempre con el pedal contrario nuestra posición respecto al enemigo.

Una maniobra que recomiendo intentar a todo el mundo, os encantará. Si sale se siente uno realmente sorprendido de lo que ha conseguido.