1.- Distancia óptima de tiro.

Hablar de una “distancia óptima de tiro” general es absolutamente imposible, pues no existe una distancia fija, ni remotamente.

La distancia óptima de tiro depende de muchos factores, tanto objetivos del entorno del combate, como subjetivos del piloto y su costumbre o hábito.

Entre los primeros podemos contar:

- El calibre de las armas.- En principio cuanto menor es el calibre de nuestra arma más tendremos que acercarnos para hacer daño al enemigo; pero lo cierto es que también podría predicarse justo lo contrario, es decir, a mayor calibre, mayor es la caída de los proyectiles (por la menor velocidad de salida y el mayor peso) y, por tanto, más difícil es acertar al objetivo cuanto más lejos estemos del mismo.

En fin, lo mejor es, desde luego, disparar lo más cerca que podamos, independientemente del calibre. Algunas veces sí se usan disparos lejanos, con las armas de pequeño calibre, intentando “asustar” a un enemigo que escapa o trepa lejos de nuestro alcance, a fin de que pensando que estamos más cerca comience maniobras evasivas (tijeras, toneles) y así nos permita acercarnos.

- La velocidad de salida del proyectil.- A menor velocidad de salida, más caída tendrá y más cerca tendremos que ponernos para acertar, pues será mucho más difícil aplicar la correcta deflexión o predicción a nuestro tiro.

- La convergencia de las ametralladoras o cañones.- Este dato es importante únicamente para aquellos aviones que montan armas en las alas, pues existe cierta separación entre las armas que hay en uno u otro ala. La convergencia es el punto imaginario en qué los proyectiles del cañón de un ala se juntarán con los del otro ala. Pues bien, dependiendo de la distancia a la que tengamos ajustada la convergencia, nuestro tiro será más efectivo a una u otra distancia.

En general, no debemos hacer depender nuestra distancia de tiro de la convergencia configurada, sino al revés; debemos tener en cuenta la distancia a la que más frecuentemente disparamos cuando nos acercamos a un enemigo y esa es a la que tenemos que ajustar nuestras armas. Para ello, un método muy efectivo es entrar en un dogfight con iconos (o poner iconos en nuestras misiones off-line) y comprobar cuál es la distancia a la que solemos disparar en una situación normal de combate para ajustar al efecto la convergencia y así maximizar la efectividad de nuestros disparos.

- El tipo de objetivo y su forma de desplazarse al momento del disparo.- Obviamente, a objetivo más grande (generalmente bombardero) más probabilidades tendremos de acertar desde una distancia mayor.

Pero también influye seriamente a la hora de decidir a qué distancia debemos disparar la forma en que se esté moviendo el enemigo. Si no nos ha visto y vuela nivelado, aunque sea un caza o avión pequeño, pues resultará más fácil acertarle desde, por ej., 300 m, que si se encuentra maniobrando a máximas Gs., en cuyo caso, o estamos prácticamente encima de él, con el avión tapándonos todo el colimador, o la deflexión a aplicar será tan grande que tendríamos que disparar sin ver al enemigo, al quedar tapado por la propia cabina, con la dificultad consiguiente.

- La concreta situación de combate.- Así, puede darse alguna situación de combate en la que, contra la regla general, sea muy recomendable disparar desde lejos, pese a la disminución de la probabilidad de acierto y el consiguiente desperdicio de munición. Por ejemplo, cuando nuestro líder o algún compañero está siendo acosado y disparado por el enemigo; en este caso, si no tenemos posibilidad de acercarnos rápidamente, debemos disparar aunque sea para ver si el enemigo rompe y nuestro compañero tiene oportunidad de escapar.

Para el cadete que empieza y al que van destinadas estas lecciones e instrucción, esos deben ser los factores a tener en cuenta, pues se sobreentiende que esta formando su hábito de disparo y no tiene aún “vicios” que determinen en parte tal distancia óptima de tiro.

Eso sí, los cadetes deben tener en cuenta el principio máximo al respecto de la distancia óptima de tiro: “Antes de disparar acércate mucho al enemigo; y cuando estés muy cerca, acércate más” Wink

Y es que nunca os dejéis llevar por lo que al principio os parezca ya muy cerca, porque no lo es. Tened en cuenta el artículo sobre el colimador de tiro (ver lecciones siguientes) pues os será muy útil; en términos generales, yo no dispararía hasta que el avión enemigo fuese tan grande, al menos como el diámetro del colimador (ver tracks de esta lección

2.- El tiro con deflexión.-

Para esta lección, remitimos al cadete al estupendo artículo que se encuentra en la web de los Halcones Rojos.

3.- Uso del colimador.-

Nuevamente nos remitimos a uno de los artículos de Crash que el cadete puede encontrar en la sección “La Academia” de la web: